Mi Código de la Circulación por la carretera de la vida.

"Yo soy solo uno. Puedo hacer solo lo que uno puede hacer; pero lo que uno puede hacer, yo lo hago" (John Seymour, 1914-2004). //La sinceridad está sobrevalorada.// Antes de hablar ten claro que las palabras sean más oportunas que el silencio.// No discutas nunca con un imbécil. Te obligará a rebajarte a su nivel y te ganará por experiencia.// ¡Cuántas veces no se pretende sólo derrotar al contrario, sino más bien hundirle tanto en lo profesional como en lo personal!// ¿Quieres ser feliz un instante (o dos)? ¡Véngate! ¿Quieres ser feliz para siempre? ¡Perdona!// Cuanto más pequeño es un corazón, más rencor alberga.// No juzgues. Todas las personas te pueden sorprender si les das la oportunidad.// Tú sigue adelante, si alguien quiere ir contigo, que tire también.// No mires mucho alrededor, sigue adelante pues como dijo no sé quién: "es preferible pedir disculpas a pedir perdón".// No es posible caer bien a todo el mundo. Hagas lo que hagas unos te querrán y otros te aborrecerán. Es inevitable.// El ser humano forma parte de la Naturaleza y es un ser vivo como los demás (árboles, zorros, libélulas, bacterias) por lo que está sometido a los mismos procesos vitales.// Las religiones son el principal enemigo de la salud mental.// Si soy normal, y hago esto y lo otro, seguro que todas las demás personas harán lo mismo o cosas parecidas.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Ética ambiental.

Uno se va haciendo muy mayor y llega a ciertas conclusiones. Para mí, una de las más importantes ha sido legar a comprender que no vale luchar por cualquier cosa. Quizás es que soy tan mayor que creo que el ser humano debe luchar para mejorar la vida de los demás, pero eso ya sé que es difícil de entender. El hecho es que, una vez dada por supuesto esa premisa de que por algo hay que luchar, a estas alturas yo he llegado a una conclusión diferente a la Woody Allen y quiero contárosla. Él decía que solo creía en dos cosas: el sexo y la muerte. Yo no creo en ninguna de las dos. La una porque creas o no en ella llegará un buen día (al fin y al cabo la Naturaleza es así de madrastrona) y el otro porque, en mi opinión, está sobre valorado. En mi opinión el sexo puede complicar, incluso matar, una buena relación. Así pues, descartadas estas dos verdades vitales (o entimemas) de Allen, tan extendidos por otra parte, a mí me quedan otros dos: la familia (pero esa familia, la de los cachorros y los compañeros de manada) y el medio ambiente. Las únicas cosas por las que creo que es obligatorio luchar. Quizás, si hubiera más tiempo, un poco de sexo..., no sé. El hecho es que no hay tiempo para más y hay que priorizar. Las dos únicas cosas por las que creo que es razonable luchar son esas dos: la familia y la Naturaleza. Por eso, en estos días que paso en Madrid reflexionando sobre estos temas, cuando he encontrado unos argumentos de ética ambiental, me han gustado y paso a compartirlos con vosotros. Tengo la impresión de estar llegando a entender "la cosa".
Ética ambiental.
* Todas las especies tienen derecho a existir.
* Todas las especies son interdependientes.
* La Humanidad es responsable de la custodia de la Tierra.
* Hay una responsabilidad frente a las futuras generaciones.
* El respeto por la vida humana y la preocupación por los intereses humanos son compatibles con el respeto a la diversidad biológica.
* La Naturaleza tiene un valor espiritual y estético que va más allá de su valor económico.

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